OREMOS PARA QUE EL SANTO PADRE CONSAGRE RUSIA AL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA, TAL Y COMO LO PIDIÓ LA SANTÍSIMA VIRGEN EN FÁTIMA

Monseñor Marcel Lefebvre

"... sin ninguna rebelión ni amargura ni resentimiento, proseguiremos nuestra obra a la luz del Magisterio de siempre convencidos de que no podemos rendir mayor servicio a la Iglesia, al Papa y a las generaciones futuras. Y seguiremos rezando para que la Roma actual infestada de modernismo llegue a ser otra vez la Roma Católica..."

Ramiro de Maeztu

"Venid con nosotros, porque aquí, a nuestro lado, está el campo del honor y del sacrificio; nosotros somos la cuesta arriba, y en lo alto de la cuesta está el Calvario, y en lo más alto del Calvario, está la Cruz."

"Vosotros no sabéis por qué me matáis, pero yo sí sé por lo que muero, para que vuestros hijos sean mejores que vosotros"

viernes, 30 de enero de 2009

PÍO XII Y LOS JUDÍOS


Los esfuerzos de Pío XII para salvar a los judíos durante el Holocausto están bien documentados. Sin embargo en los últimos años hay toda una generación de periodista empeñados en criticar y detractar a Eugenio Pacelli prescindiendo del iluminador estudio de Pinchas Lapide, que fue cónsul general de Israel en Milán.

Durante la ocupación alemana de Roma en la II Guerra Mundial, el papa Pacelli dio instrucciones al clero católico para que salvase todas las vidas humanas posibles. Según David Dalin, historiador y rabino de Nueva York, el número de judíos salvados de las manos nazis gracias a Pío XII se eleva a 860.000. Entre los judíos que le mostraron su reconocimiento se encuentra el premio Nobel Albert Einstein, el rabino jefe de Israel Isaac Herzog y los primeros ministros Golda Meir y Moshe Sharett. Sólo en Roma 155 conventos y monasterios sirvieron de refugio a casi 5.000 judíos. En un momento dado al menos 3.000 se libraron de ser deportados a los campos de concentración por haberse refugiado en la residencia de Castel Gandolfo, en la Universidad Gregoriana y en el Instituto Bíblico. Está por hacerse la película que muestre un poco de gratitud a Pío XII.

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